Te crees que juegas en otra liga, que eres el rey del engaño y crees como buen iluso, que probablemente no existe una jugada mejor. Juegas a dos bandas, a querer hacer una carambola imposible en un juego que no sabes parar.

Te crees que todo esta bajo control, que lo que haces no es engañar sino simplemente regatear la verdad. Pero lo que no te dice nadie es que tarde o temprano la casa se te caerá encima, lo fácil se volverá complicado y lo complicado se te volverá imposible.

Las medias verdades pasarán a ser completas mentiras y entonces, tendrás que empezar a justificar actos que hasta hace nada pasaban más que desapercibidos…

Jugar a dos bandas es tener miedo a dejar un pasado para ir con un presente que no tiene futuro. Es miedo a ver la realidad, es miedo de creer que antes de caer y sufrir prefieres tener algo donde dejarte caerte muerto.

Muerto, que suena demasiado duro para asumirlo, pero de esta manera estas matando poco a poco lo que un día te dio momentos de felicidad…  

[adinserter block=»2″]

Dos, que siempre es un numero perfecto cuando no se suma nada más, pero en este caso, más bien, es dos más uno, y aquí las cosas se empiezan a complicar. Intentar controlar lo que dices, lo que haces y lo que debes hacer se vuelve una tarea de locos en la que te acabas complicando la vida…

Y todo, ¿para que?. Para nada, porque si el pasado ya no suma, es que empieza a restar y se debe decir adiós. Sin pensar en los años que se llevan, sin pensar en nada más que en una simple matemática. Lo que no suma resta. Y no existe ningún paréntesis mágico para darse cuenta.

El problema es saber que lo nuevo no es tan bueno, que no es oro todo lo que reluce. Y saber que simplemente es un juego de fuego en el que no existe nada más que el mero morbo de una situación inesperada en la que te crees el centro de atención.

El problema es que no eres capaz de decir adiós al pasado porque sabes que el futuro sería mucho peor…  

Y jugar a dos bandas tiene dos problemas que todos sabemos; el primero es que tarde o temprano todos se juntan en el mismo espacio, y lo segunda e importante es que una de las bandas al final se acaba dando cuenta de como funciona el juego.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *