Siempre. Da igual la situación, todo el mundo tiene alguien que lo hace todo más fácil, que le da rienda suelta a su imaginación para meterse en la tuya. Sonrisas eternas en días oscuros. Siempre está cuando no se llama y siempre llama cuando nadie lo hace.
Tiene el don de la oportunidad. O más bien conoce perfectamente cuando pides ayuda sin decir nada. Lenguaje mudo que dice más que cualquier palabra que puedas encontrar en otra conversación. Lenguaje mudo que lleváis años practicando sin saber…
Lo hace fácil, mientras el resto no para de preguntar para encontrar respuestas ella sabe que hay situaciones en las que preguntar es secundario, que lo primero es estar. No duda. No pregunta, solo acude sin más. Hay gente que pregunta mucho y está muy poco y existen situaciones en las que estar lejos es como no estar.
Piensan que WhatsApp incluso ya sustituye los abrazos que muchas veces hacen que se queden pequeños los cuerpos que se juntan. Error grave querer sustituir lo que casi siempre es una bocanada de aire fresco. Besos apasionados sin abrir la boca, así son los abrazos que poca gente sabe dar ya.
Pequeños detalles de quién siempre lo hace todo más fácil sin pedir nada a cambio.
De quién mañana no te echará en cara lo que hace hoy por ti, porque no busca ningún fin concreto, salvo sacarte tres o cuatro sonrisas de una boca que tiene días sin ganas de sonreír…
Así es la suerte de la vida. Así es tener la suerte escoger bien las personas que te rodean. Hay loterías que nos tocan cada día y ni siquiera lo sabemos. Que a veces somos muy injustos con los que siempre lo hacen todo más fácil. No valoramos lo que tenemos porque nos parece normal, lo entendemos como rutina hasta que un día lo echamos de menos…
Así somos. Despreciamos a quien siempre está y ponemos en un pedestal a quién está cuando le interesa….