Para que me sigas acompañando en el sentimiento,como solías hacerlo siempre. El mismo sentimiento de querernos a morir que un día se esfumó como las cenizas que se lanzan al mar…
Mi más sentido quédate, de verdad. Quizás haya más pero no mejores o ahora mismo no soy capaz de creer en nadie más.
Los minutos de silencio ya no son lo mismo si no me pierdo en tus ojos. Que las noches son de luto en esa cama que siempre nos curó todos los males…
Que el alma llora la ausencia de quien pensó que podía ser su gemela y que hoy le ha dejado tirado a mitad del camino. Que las flores ya no son lo mismo porque no huelen a ti.
Que los sueños han pasado a ser pesadillas, el mismo día que quisiste salir por la puerta sin mirar atrás. Y que yo a día de hoy tengo cara de velatorio lleno de lágrimas…
Mi más sentido quédate. De quien ya le han dado demasiados «lo siento, no es por ti» . Del mismo que ya se ha cansado de estar de luto por quien solo lloró para aliviar una decisión que estaba tomada hace tiempo.
Hoy quizás sea un cadáver sentimental más en el cementerio de los valientes. De los que dicen lo que piensan y de los que piensan lo que sienten. Seré héroe de una guerra que no tenía sentido, pero siempre tendré la conciencia tranquila.
Quizás tu guerra no era la misma que la mía. Y quizás también tú conciencia no pueda estar tranquila cuando se cruza con la mía…
Mi más sentido quédate.
Porque tú no tienes memoria pero yo hubo un día que me moría por ti.