Yo, porque hoy me toca hablar de mí. Yo, desde el punto de vista más egoísta porque es un punto que a veces es necesario recordar.
El mismo que hace tiempo pero en una versión mejorada por los años, o por la vida, porque uno no siempre sabe porque acaba creciendo.
Yo 2.0 que no es nada más que una actualización de mi gracias a las vivencias de un pasado, ya más que pisado.
Sin rumbo establecido y quizás preocupado por no encontrarme ni siquiera en el mapa. Yo, sostenido en el tiempo. Resistiendo como siempre lo quise intentar y superado a veces como nunca me quise encontrar.
El mismo loco que apuesta por querer antes que por joder. El mismo que quizás esta cansado de que no le descuelguen el teléfono ninguna vez…
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Yo. Porque hoy hablo de mí y no de ti. Momento egoísta de quien nunca lo ha tenido como prioridad. Dar y no esperar recibir, opción descartada en el momento actual.
Porque uno pierde la esperanza de recibir lo que lleva dando años. Yo, el mismo que ha sabido modificar sin cambiar.
Yo, de selección natural, sin querer nunca ser quien no soy ni puedo llegar a ser.
Confiado, momento que hace años tenia que llegar y no llego. Yo, solo, mejor que mal acompañado. Yo, de ahora, de hoy, de vivir el momento, de dejar atrás lo que me he cansado de mirar, de dejar de vivir allí para empezar hacerlo aquí…
Yo, al fin y al cabo, con mis más y mis menos pero siempre yo. En cualquier lugar y situación. El mismo loco que lleva años apostando por vivir a su manera y que prefiere morir de pie que vivir arrodillado…
«Porque aquellos que nunca han caído es porque probablemente se han arrastrado toda su vida.»